Divulgación científica que cautiva a los más pequeños
En casa, leer el diario era un ritual matutino de los fines de semana: mientras desayunábamos, mis padres comentaban en voz alta las secciones que más les interesaban. Yo me quedaba embelesada escuchándolos cuando leían sobre ciencia, los avances en el mapeo del genoma humano, el diseño de corazones artificiales o el descubrimiento de exoplanetas. Aunque no lo llegara a entender del todo, para mí era alucinante aquello de los agujeros negros y los superconductores. Y aunque no me haya dedicado a una profesión de laboratorio, me siento muy ligada a este mundo y me encanta trabajar para entrelazar puentes entre aquello que llaman “las letras y las ciencias”.
Ahora, con mi hija de 7 años, me esfuerzo por poner a su disposición contenidos científicos adaptados a su edad. En la actualidad, las opciones son muchas y muy buenas. A continuación, os comparto una pequeña selección, el top five de los programas preferidos de mi pequeña amante de la ciencia. Son accesibles y en diferentes formatos. Todavía no he encontrado un niño o niña de esta edad que no se vuelva fan cuando los descubre. Si tenéis pequeños cerca, aprovechad para dárselos a conocer porque estaréis abriéndoles las puertas a un mundo fascinante.
Principia Kids: ciencia para niñas intrépidas
A través de historias, ilustraciones y experimentos, los pequeños exploradores pueden descubrir los misterios del universo y formar parte de un selecto club de intrépidos. Pertenece a la revista madre Principia, que combina ciencia y arte de una manera única, siempre acompañando los textos con ilustraciones cautivadoras. Con su proyecto Kids consigue estimular la curiosidad entre los más jóvenes. Algunos de los temas que aborda son la biología, la física, la astrofísica y la historia de la ciencia con enfoque de género.
En la página web hay publicados artículos, videos y otros materiales descargables, además de un podcast sobre medio ambiente y cuentos sobre ciencia espeluznante. En la tienda online se pueden comprar juegos originales. Por ejemplo, un timeline de historia científica centrado en investigadores e investigadoras españolas o el tradicional juego de parejas y memoria, pero en esta ocasión sobre científicos que deben emparejarse con sus respectivos descubrimientos. Hay diferentes opciones de suscripción, desde los 20 euros y sus portadas son preciosas.
Brainchild
¿Alguna vez te ha preguntado tu hijo por qué soñamos o cómo funciona el cerebro? Entonces Brainchild (Pequeñas grandes mentes”) es el programa perfecto para tu familia. Es una serie de Netflix producida por el artista Pharrell Williams y dirigida por Adam “Tex” David. Cada episodio aborda un tema específico: el funcionamiento del cerebro, la importancia del sueño, el impacto de las redes sociales, los gérmenes, las emociones, los sentidos o la creatividad. Uno de los puntos fuertes es que realizan experimentos reales y explicaciones visuales muy divertidas.
Sahana Srinivasan es la actriz y comediante que junto a la también actriz y podcaster Ali Ward conducen a los espectadores por los diferentes retos y experimentos. El estreno de la primera temporada fue en 2018 y la pena es que se trata de una producción única hasta la fecha, con 13 episodios. Cada entrega tiene una duración que ronda los 20 minutos y ojalá hagan una nueva muy pronto. Nosotros ya hemos visto cada episodio unas cinco veces.
Sapiensantes
Una verdadera obra de arte radiofónica de la divulgación científica y está en Radio Nacional. Cuenta con Xaviera Torres (guionista especializada en divulgación para jóvenes) y Paula Aller (que presenta el programa Sapiens en la misma casa). Es la continuación de un proyecto anterior de igual calidad llamado La Lupa Sónica, del que también podéis disfrutar dos temporadas (2021-22).
Sapiensantes está orientado a estimular la curiosidad infantil: los niños y niñas plantean preguntas, que luego son respondidas mediante explicaciones adaptadas a su nivel, usando lenguaje accesible, ejemplos, experimentos imaginativos o situaciones cotidianas. Fue galardonado con el Premio Prismas por el episodio “¿Por qué andamos con dos piernas?”.
Diseño sonoro original y narraciones inmersivas. Xaviera Torres es una divulgadora espectacular. Se encarga de responder las dudas de los niños, estructurar las explicaciones (con fases del método científico: observar, hipótesis, experimento, conclusión) y hacer que los contenidos sean pedagógicos y atractivos. Una receta perfecta.
Comics de grandes matemáticos
Conocí al autor de estos cómics sobre grandes matemáticos de la historia durante la defensa de su tesis doctoral precisamente centrada en la divulgación a través de la novela gráfica. Desde ese día, empezamos a leer en casa sus historietas, de manera que mi pequeña lectora ya reconoce nombres como Gauss, Arquímedes, Ada Lovelace o Galois, y se emociona sabiendo qué hicieron, cuándo vivieron y por qué fueron importantes.
Esta colección de comics didácticos es obra de José Pérez Zarzo (encargado de las ilustraciones) y Santi Selvi (del texto), y está publicada por Bang Ediciones dentro de la colección Mamut Listo. Las viñetas funcionan muy bien entre los jóvenes: combinan el valor informativo con historias que enganchan.
Nuestros preferidos son los números dedicados a Gauss, el príncipe de las matemáticas, conocido por sus aportes fundamentales en álgebra, la teoría de números y la estadística. Y el dedicado a Florence Nightingale, la dama de la lámpara, que además de ser una pionera de la enfermería moderna, utilizó sus habilidades estadísticas para mejorar la salud pública y salvar vidas durante la guerra de Crimea.
Érase una vez… la Vida, el de toda la vida
Érase una vez… la Vida no necesita presentación porque es todo un clásico de la difusión de la ciencia. Se trata de una serie de dibujos, de producción francesa que marcó a la generación de personas que ahora rondamos los 40 y 50. Pienso que todavía conserva todo su valor educativo. Producida por Albert Barillé y estrenada en 1987, forma parte de la popular colección “Érase una vez…” dedicada tanto a la divulgación científica como histórica. Combina el rigor científico adaptado a la audiencia juvenil, con la narración visual y los personajes memorables para explicar de forma amena cómo funciona nuestro organismo.
La serie está compuesta por 26 episodios de unos 25 minutos cada uno. A través de una historia continua, lleva al espectador al interior del cuerpo humano en el que conviven simpáticos glóbulos rojos, neuronas, anticuerpos, virus narizotas y bacterias malvadas. El tono es cercano y didáctico y no solo enseña anatomía y fisiología, sino también hábitos de vida saludables, higiene, prevención y respeto por el propio cuerpo.
Se puede ver en Prime Video como parte de su catálogo de series animadas, pero si sois coleccionistas, también la podéis adquirir en DVD por menos de 20 euros. Aunque Érase una vez… la Vida pertenece a una época con un ritmo narrativo más pausado que las series infantiles actuales, ese toque “vintage”, sin tanta estimulación visual, puede ser precisamente uno de sus mayores aciertos hoy en día.